Rumbo a la Guerra de Donbáss




Para muchos, la Guerra de Donbáss no fue más que un espontáneo acontecimiento en un país lejano, que apareció y desapareció de nuestros telediarios casi sin que nos diésemos cuenta. Sin embargo, es un conflicto que merece nuestra atención; no sólo porque deberíamos conocer la situación política internacional, sino también porque es un ejemplo del efecto que pueden tener las influencias extranjeras en un Estado.

Tras la caída de la URSS en 1991, Ucrania se declara independiente a través de un referéndum, secundado por la victoria del candidato pro-ucraniano de centro-derecha Leonid Kravchuk. La separación se veía por la mayoría como una posibilidad de alcanzar un futuro mejor alejado del caos en el que se veía sumida la antigua unión, pero ya se podía observar cierta desaprobación del resultado en algunos territorios. Durante dicho mandato se intentó reducir la presencia rusa en el país, a pesar de que su nuevo líder había sido un destacado dirigente del Partido Comunista. El reparto de la Flota Soviética del Mar Negro, así como las reivindicaciones independentistas en Crimea y la mala situación económica no propiciaron una situación especialmente estable. Finalmente, se convocan elecciones para el 26 de junio de 1994, en las que además de ganar Leonid Kuchma se muestra una cierta división dentro de Ucrania, al ser la zona oeste pro-ucraniana y la este pro-rusa.

Es entonces cuando se vuelven a recalcular las estrategias políticas del gobierno; defienden la cooperación con Rusia como algo positivo, pero a la vez se busca el apoyo de Occidente, con el deseo de convertir al país en un nexo entre ambos bandos. Como resultado de dicho cambio se intenta mantener una situación de equilibrio a través de diversos acuerdos. En primer lugar, se garantiza el apoyo de Rusia gracias al Tratado de Amistad, Cooperación y Asociación, según el cual se le arrendaba la base naval de Sebastopol, y con el Tratado de No Proliferación Nuclear de 1994, que aseguraba también una buena relación con Estados Unidos. Así mismo, Kuchma se acerca a Europa al convertirse en miembro del Consejo en 1995, llevando a cabo medidas para favorecer el libre mercado y firmando en 1997 la Carta de Asociación Especial con la OTAN. A todo esto se suma el apaciguamiento de Crimea al convertirla en una comunidad autónoma.

A pesar de ser acusado a finales de su primer mandato de autoritarismo, vuelve a ganar las elecciones en noviembre de 1999 contra Symonenko. En el 2000 las relaciones con el Consejo de Europa se tensan a raíz de la aprobación de ciertas enmiendas que ampliaban su poder, apoyadas por un referéndum de dudosas cifras. Sin embargo, el discurso económico reformista y pro-occidental de Kuchma mantiene la amistad con la Unión Europea y Estados Unidos. Al año siguiente se deteriora aún más su imagen como resultado de la encarcelación del miembro de la oposición Yulia Timoshenko y el escándalo Kuchmagate, según el cual habría encargado el asesinato del periodista Gongadze. También sustituye a Yuschenko por ser más popular entre el electorado. Dichos sucesos hacen que escale la tensión y se produzcan diversas manifestaciones. Además, los fracasos diplomáticos con el mundo occidental hacen que su mirada se vuelva hacia Rusia.

Entre 2003 y 2004 se da una polarización social en Ucrania no vista desde tiempos de la independencia. Se suceden las amenazas y agresiones físicas contra militantes y periodistas críticos. Al llegar las elecciones en noviembre del 2004 gana Yanukovych, sucesor de Kuchma, frente a Yuschenko. Inmediatamente surgen acusaciones de fraude y los ciudadanos se movilizan para mostrar su rechazo en la llamada Revolución Naranja. Como consecuencia de ello, y con la esperanza de rebajar la tensión, el Tribunal Supremo considera la última ronda ilegítima y convoca otra más, que trae la victoria de Yuschenko y el fortalecimiento de Yulia Tymoshenko. Sin embargo la situación se desestabiliza rápidamente debido a que es un gobierno en coalición, por lo que se acaba cesando a casi todo el gabinete. Por si fuera poco, surge otro obstáculo debido al deterioro de las relaciones con Rusia, que llevan a las guerras del gas y a un mayor acercamiento a Europa.

Una vez más, Ucrania vuelve a cambiar de rumbo tras las elecciones de 2010 en las que gana Yuschenko; aquella posibilidad de ser un puente entre naciones vuelve a resurgir y se buscan políticas que lo propicien, terminando por ejemplo con las guerras del gas y permitiendo que el ruso sea lengua cooficial para 13 de las 27 regiones (dicho recurso utilizado también para conseguir más votos). El primer tropiezo diplomático se produce con la encarcelación de Tymoshenko, criticado tanto por Rusia como por Europa. Las relaciones con esta última empeoran también cuando Yuschenko decide no firmar el Acuerdo de Asociación y el Acuerdo de Libre Comercio. Dicho paso es rechazado por los estudiantes, que se movilizan el 21 de noviembre, dando lugar a las manifestaciones pro-europeas, nacionalistas y liberales conocidas como Euromaidán, que denuncian además el sometimiento a Rusia. Comienzan con fuertes en la Plaza de la Independencia de Kiev, pero se van volviendo cada vez más violentas, en parte por la llegada de neonazis e hinchas y en parte por la reacción agresiva de Yanukovich, que acusado de la muerte de manifestantes, decide huir a Jarkov el 22 de febrero de 2014 y posteriormente a Rusia, acusándoles de golpe de Estado. Yanukovich es sustituido por Turchinov, quien acabó pidiendo ayuda a Europa y Estados Unidos para sacar al país de la bancarrota. El 2 de marzo comienzan a aparecer tropas rusas por Crimea bajo el pretexto de proteger a la población, coincidiendo también con manifestaciones pro-rusas en contra del nuevo gobierno en las provincias de Donetsk y Lugansk (Donbáss). Tras la adhesión de Crimea a la Federación de Rusia el día 16, escala la tensión y se convierte en un conflicto armado. El Protocolo de Minsk, firmado en septiembre de ese mismo año con la intención de poner fin a la guerra, ha sido incapaz de acabar con los conflictos en la zona.

La evolución política de Ucrania a lo largo de estos últimos años es confusa y a veces difícil de seguir. Sin embargo, hay una idea que sobresale por encima de todos los conflictos, tratados y elecciones: es muy fácil que un país se vea arrastrado hacia el desastre en unos pocos años.

Realizado por: Celia Martínez López, Rocío Rilo Sánchez y Sandra Sánchez Ferrón (LLMMCC Grupo 110)

Bibliografía

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https://elpais.com/diario/1994/11/17/internacional/785026802_850215.html (fecha de último acceso: lunes 5 de marzo de 2018).
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http://www.gehm.es/biblio/Ucrania_la_pequena_rusia.pdf (fecha de último acceso: lunes 5 de marzo de 2018).
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Utrilla, Daniel (2010): «El prorruso Yanukovich gana las elecciones presidenciales», en El Mundo:
http://www.elmundo.es/elmundo/2010/02/07/internacional/1265566019.html (fecha de último acceso: lunes 5 de marzo de 2018).
VV.AA (1991): «Ucrania se independiza y anuncia que no firmará el Tratado de la Unión», en El País:
https://elpais.com/diario/1991/12/03/portada/691714803_850215.html (fecha de último acceso: lunes 5 de marzo de 2018).
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http://www.marxist.com/wither-ukraine-es.htm (fecha del último acceso: lunes 5 de marzo de 2018)



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